Probablemente, la unión sexual Yab yum sea la joya de la corona de las posturas tántricas por la intimidad y conexión profunda a la que llegan los amantes y el crescendo imparable del placer hasta el estallido del multiorgasmo.
Sin embargo, hay otras posturas muy satisfactorias para el sexo tántrico o, al menos, para disfrutar de un sexo pausado, porque además de hacernos salir de la rutina de otras más comunes, permiten acariciar el cuerpo de nuestro amante, disfrutar de la técnica Pompoir, la estimulación del glande y puntos erógenos de la vagina como el Punto G, la entrada de esta y la pared de separación interna con el ano.
1. El molino de viento
Cómo realizarla
La persona que será penetrada se acuesta bocabajo con las piernas abiertas y la cadera elevada, para facilitar la penetración. La persona que penetre se tumbará bocabajo, de espaldas a su amante, con las piernas abiertas y la cabeza mirando hacia los pies de este, doblará el pene con cuidado y penetrará lentamente la vagina o el ano.
Claves de la postura El molino de viento
- Demórate en los preliminares. Un pene erecto apunta naturalmente hacia arriba, por lo que será necesario mucho calentamiento previo para aumentar la lubricación femenina y la relajación vaginal y de los ligamentos de soporte del pene.
- Penetra despacio. Como un pene erecto suele apuntar hacia arriba, deberás penetrar despacio para no tensar sus ligamentos suspensorios y lastimarte.
- Usa lubricante. Aunque estéis lo suficientemente excitados, el lubricante facilitará la penetración vaginal. Obviamente, el uso de lubricante es imprescindible si vas a penetrar analmente, ya que el ano no lubrica por sí mismo.
- Mantente inmóvil. La penetración no requiere movimientos penetrativos vigorosos, sino una total inmovilidad, para focalizarse en las sensaciones que produce el roce sutil del pene con las paredes vaginales o el ano, que se puede potenciar apretando este de manera rítmica o las paredes vaginales mediante la técnica Pompoir, que produce sensaciones similares a una felación.
- Si la persona penetrada cierra las piernas, le resultará más sencillo practicar la técnica Pompoir y también mantener el pene en su interior, evitando que se salga.
Características
- Debido al ángulo de penetración hacia abajo, la estimulación del glande será más intensa y también la de una zona vaginal muy erógena: la pared que separa la vagina del ano.
- Si eres fetichista de los pies, te encantará El molino de viento; podrás verlos, acariciarlos, olerlos, lamerlos, chuparlos… mientras disfrutas de la penetración.
- Al estar de espaldas, no podrás entregarte al morbo de ver gozar a tu amante, aunque eso te permitirá cerrar los ojos y centrarte en las sensaciones que te produce la penetración.
- Como el pene tiene que doblarse hacia abajo y hacia atrás para penetrar, dependiendo de su curvatura natural, esto podría ser potencialmente doloroso; salvo que se penetre con un arnés o strap-on.
2. Rueda giratoria
Qué es
La rueda giratoria es una sucesión de posturas sexuales tántricas, cuya característica principal es que el hombre penetra vaginalmente a la mujer y gira alrededor de ella, utilizando el pene como eje central (y sin sacarlo), en una secuencia de cuatro fases, que puede volver a comenzar de un modo cíclico, como una rueda giratoria.
Al igual que en las otras posturas, la rueda giratoria debe practicarse con lentitud, centrándose en las sensaciones que produce el roce del pene con las paredes vaginales, que se pueden incrementar mediante la técnica Pompoir.
Cómo realizarla
- Primer movimiento. La rueda giratoria parte de la Postura del misionero (la mujer tumbada boca arriba con las piernas abiertas y el hombre, sobre ella, bocabajo y cara con cara).
- Segundo movimiento. Es el que corresponde a la ilustración. El hombre gira lentamente, sin salirse de la mujer, deslizando suavemente la pierna derecha y luego, la izquierda, sobre la izquierda de la mujer (o a la inversa), formando una X.
- Tercer movimiento. El hombre gira totalmente, colocando sus piernas a ambos lados de los hombros de su amante.
- Cuarto movimiento. Continuar el giro hasta quedarse en la postura inicial del misionero.
Características de la Rueda giratoria
- Es una postura muy completa, ya que cada secuencia permitirá la estimulación de distintos puntos vaginales erógenos, verse o no las caras, caricias en todo el cuerpo (incluyendo los pies) y la masturbación del punto G del hombre o próstata, con los dedos o un dildo anal.
- También es poco profunda, por lo que no estimulará el fondo de la vagina ni la totalidad del pene. Por el contrario, permitirá una gran estimulación del glande, la entrada de la vagina y el punto G femenino.
- Resulta complicado realizar la transición entre movimientos sin que el pene se salga.
3. Cucharita
Cómo realizar la postura de la Cucharita
La persona que va a ser penetrada se tumba de lado con las piernas cerradas (también pueden abrirse, aunque eso dificultará la técnica Pompoir) en postura fetal. Su pareja se acopla a su espalda y la penetra por detrás, vaginal o analmente, con el pene o con un arnés o strap-on.
Características
- La postura de la cucharita es muy suave y relajante porque favorece las caricias y la intimidad; la persona que está detrás puede acariciar todo el cuerpo de su amante, incluyendo los pechos, el vientre y el clítoris, y besar y morder su cuello, orejas y hombros.
- También es poco profunda, por lo que no estimulará el fondo de la vagina ni toda la superficie del pene, salvo que se tenga uno grande, en cuyo caso es perfecta. No obstante, como hemos visto antes, que una postura sea poco profunda no tiene por qué ser algo negativo, puesto que permite la estimulación del glande, la entrada de la vagina y, en este caso, el punto G femenino.
- Además de ser ideal para el sexo tántrico, también lo es para mujeres embarazadas, ya que no se somete a la barriga a ninguna presión.
4. Cuatrisquel o Bruto
En mi línea de rebautizar posturas sexuales, como Ouróboros o El brazo tonto de la ley y técnicas como el vikingo o hacer un nido, renombro a esta a la que llaman El bruto, como Cuatrisquel, porque me recuerda a este símbolo que representa una cruz de brazos curvilíneos.
Cómo realizarla
La mujer se acuesta bocarriba, pega la parte superior de su espalda al suelo y eleva las piernas. La persona que va a penetrarla se coloca de pie, de espaldas a ella y con las piernas separadas, baja un poco el cuerpo como si fuera a sentarse sobre el culo y vulva de ella, dobla el pene para penetrarla vaginalmente y luego, la sujeta de los muslos para mantener el equilibrio.
Claves de la postura Cuatrisquel
- Para evitar lesiones es muy importante (además de una buena forma física y flexibilidad) que la mujer afiance su cuerpo apoyándose con fuerza en la parte alta de la espalda, mantenga los brazos extendidos y los antebrazos apoyados en el suelo; y que la persona que va a penetrarla con el pene o un dildo no se siente sobre ella, sino que cargue su peso sobre la musculatura de sus piernas (como cuando se hacen sentadillas) y que sostenga a la mujer agarrándola de los muslos, para que no se sobrecargue su espalda.
- Además, deberán seguir las mismas pautas que con la postura El molino de viento: demorarse en los preliminares, penetrar despacio, usar lubricante y disfrutarla en casi total inmovilidad.
Características
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- La postura del cuatrisquel es difícil de ejecutar y, sobre todo, muy peligrosa. Por un lado, el ángulo es aún más forzado que El molino de viento y hay mayor riesgo de lesionarse el pene e, incluso, fracturárselo); por otro, la mujer debe colocarse en una posición que es una combinación entre las asanas Sarvangasana y Halasana (arado) del yoga, y si no la hace correctamente puede lesionarse la espalda.
- Debido al ángulo de penetración hacia abajo, la estimulación del glande será intensa y también la de la pared interna que separa la vagina del ano.
- La penetración es superficial, por lo que es aplicable lo que hemos visto sobre este tipo de posturas.
- Además de para el sexo tántrico, algunos también la recomiendan para el sexo anal; yo no la considero apropiada: la dificultad de la postura puede provocar la contracción involuntaria del ano.