Sexo

La eyaculación de las mujeres y el Squirting

La eyaculación femenina y el Squirting no son sinónimos. Cuando hablamos de sexo parece que ‘todo vale’; los vídeos x que se reproducen en nuestras cabezas pretenden ser más reales que la propia realidad, y la Industria lo sabe. Si bien la ficción pornográfica puede ayudarnos a liberar prejuicios, también es cierto que puede frustrar nuestras expectativas de placer. Y esto es especialmente sensible cuando se trata de las emociones de las mujeres. Así que, hablemos con claridad para poder identificarlas.

¿Qué son y cómo ocurren la eyaculación femenina y el Squirting?

El Squirting y la eyaculación femenina

¿Qué es la eyaculación femenina?

Como escribe nuestro admirado bioquímico Pere Estupinyá en sus Apuntes científicos desde el MIT, la eyaculación femenina es un líquido transparente o blanquecino que suele confundirse con el flujo vaginal propio de la lubricación natural. Normalmente, suele quedarse dentro de la misma vagina. Pero hay ocasiones (sobre todo en posturas sexuales en las que la mujer se encuentra arriba) en que la eyaculación se presenta a borbotones, coincidiendo con los espasmos orgásmicos.

¿Cómo se produce la eyaculación femenina?

Como bien apunta Ian Kerner, la eyaculación femenina no depende de la voluntad de las mujeres. Que salga o no, o que lo haga en mayor o menor cantidad es una cuestión hormonal ligada a la excitación y a las glándulas de Skene (conocidas como «Punto U» o «próstata femenina») que se sitúan entre el clítoris y la vagina. De hecho, se las considera un vestigio evolutivo de la próstata masculina. Y es precisamente por ese mismo punto por el que se eyacula. Y sí, en principio todas lo hacemos, o cuanto menos, tenemos el potencial para ello. No se requiere un tipo de estimulación específica: puede darse por masaje de clítoris, Punto G, ambos, o simple y llanamente, por la forma más común en la que alcancéis el clímax. Con independencia del tipo de estimulación, y como casi siempre, el squirting es mucho más probable mediante la masturbación femenina.

¿Qué es el Squirting?

El Squirting es, sencillamente, la expulsión ‘a chorro’ de líquido transparente, que es, casi con toda probabilidad, orina (demostrado por varios investigadores, como veremos más abajo). Sin embargo, la cuestión se resiste: por ser pis, ¿deja de ser o es menos placentero?

La controversia sobre si es orina o no, parece tocar a su fin: el estudio de Rubio-Casillas y Jannini revela que ese líquido sale directamente de la vejiga y los componentes del mismo son el ácido úrico, la creatinina y la urea. Es decir, es orina que no parece serlo ya que no tiene color, ni olor.

Otro estudio más reciente en The Journal of Sexual Medicine corrobora que se trata de orina, si bien enfatiza la rapidez con la que se llena la vejiga. Esta es probablemente la causa de que sea tan transparente y, también, el hecho de que no produzca tanto rechazo. Es más, no sólo se trata de una cuestión de morbo, sino también de placentera  relajación muscular que, acompañando al orgasmo (¡e incluso de la propia eyaculación femenina!), puede generar las más adictivas y satisfactorias sensaciones en el cuerpo de una mujer. Esto es algo que obvian los científicos, probablemente porque son hombres en su mayoría. Desde nuestro punto de vista, lo importante reside en sacudirse la caspa y procurar el disfrute sexual: si a alguien le da asco un líquido transparente y sin olor, quizás no debería practicar sexo, o mejor aún, debería acudir a un especialista con el que tratar esa fobia. Y esto es aplicable a las personas que vetaron la aparición de escenas de Squirting en el cine porno británico…

¿Cómo se produce el Squirting?

En los vídeos porno que vemos, las actrices han ingerido altas cantidades de agua. De cualquier modo, tiene el mismo mecanismo que la micción y, como esta, tampoco requiere una ingesta masiva de líquidos.

Dicen que hay mujeres que –voluntaria o involuntariamente– son capaces de llenar vasos, pero el testimonio más repetido es el supremo estadio de gozo que alcanzan. En su inmensa mayoría lo logran con un estimulador para el Punto G (o combinada con el masaje de clítoris) y en postura sentada. Aunque también las hay que lo han conseguido gracias a vibradores para el clítoris o a espléndidos cunnilingus. Si deseas aprender técnicas más específicas, visita este artículo: Técnicas para lograr la eyaculación femenina o squirting