Juguetes eróticos

Juguetes eróticos artesanales o la lujuria por el lujo

Podemos abominar o adorarlos, pero el mero hecho de saber quién posee un juguete erótico bañado en oro de 24 quilates despierta naturalmente nuestra atención. Cuenta la leyenda que, tras el Gran incendio de Roma, Nerón mandó construir la Domus Aurea (Casa de oro) en el centro de la ciudad. La desmesura, la abundancia como signo de la ostentación no son solo una muestra de megalómana omnipotencia, casi se podría decir que los delirios de grandeza son parte consustancial de los seres humanos. De todos y cada uno de los humanos: si nuestras vidas reposan sobre la necesidad y la abundancia, entonces nuestro deseo se moverá desde los recursos que creemos necesitar hasta los que pensamos que no necesitamos. Así, podemos llegar a preguntarnos si el placer sexual es necesario para vivir. ¿Es necesario?

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Juguetes eróticos

No estamos descubriendo nada si decimos que desde el más estricto sentido reproductivo de nuestra existencia biológica, no requerimos ningún tipo de placer para dejar descendencia. Es más, estos conceptos estarían reñidos entre sí, desde el momento, por ejemplo, en que impliquen el retraso de la eyaculación masculina. Es decir, cuanto menos, el placer sexual no sería –biológicamente– «necesario».

Pero seamos sinceros, las necesidades se establecen plásticamente, a nuestro gusto y conveniencia: si hoy tengo que coger el autobús, necesito un coche; pero si mañana paro en el semáforo al lado de un Porsche, necesitaré un Ferrari y un diamante más brillante que el que llevaba la conductora del Porsche. Porque no nos engañemos, todo lo que brilla nos atrae bien porque inconscientemente lo identificamos con un sentido de propiedad exclusivo, bien porque lo asociamos instintivamente a un recurso vitalmente necesario.

La lujuria por el lujo

Hay muchas cosas en esta vida con las que podemos caer en la adicción, pero hay pocas que sean tan sensual y saludablemente adictivas como el apetito carnal y la experimentación con los placeres sexuales. Sobre todo cuando descubrimos nuevas sensaciones en pareja porque son como si estuvieran hechas a medida: cuando un amante nos hace llegar al clímax de una forma y/o con una intensidad jamás vivida, es cuando podemos decir que ha hecho arte con nuestro cuerpo. Artista del sexo, sastre de los orgasmos, artesana del placer, podremos dar el apodo que nos suene mejor, pero, en cualquier caso, siempre será percibido como un lujo: la abundancia de algo escaso.

Juguetes eróticos artesanales

Los vibradores y dildos más lujosos de LELO están hechos con acero inoxidable o revestidos con un baño en oro de 24 quilates. Son joyas eróticas para los juegos sexuales más lascivos y solo se fabrican por encargo: son piezas de artesanía.

YVA

LELO

Un pequeño masajeador de clítoris muy potente pero casi silencioso, pensado para las mujeres que disfrutan las sutilezas de los juegos eróticos más intensos. El regalo perfecto para las bodas de plata o de oro.

INEZ

LELO

El masajeador más lujoso de la marca, es un vibrador para el Punto G que bien puede (¡y debe!) ser usado para el resto de zonas erógenas. INEZ abre el apetito más voraz de las personas más sofisticadas.

OLGA

LELO

Es el concepto de dildo lujoso, estiloso y funcional hecho realidad. La distinción y la delicadeza en dos tipos de punta, para tener a disposición el tipo placer que te quieras otorgar.

EARL

LELO

El masaje anal tiene su referente en EARL. Los señores y señoras más ególatras pueden consentir sus cuerpos de la manera más exquisita con este espléndido plug anal.

¿Por qué acero inoxidable y oro?

#1 Son materiales seguros y fáciles de limpiar. Y eso es lo que piden nuestros delicados cuerpos.

#2 Aportan sensaciones completamente distintas a las de otros materiales. Sobre todo, se ofrecen para juegos en los que las diferencias térmicas nos hagan nadar en la abundancia de placeres inimaginables.

#3 Son lujosos… y los mejores lujos son los que reservamos para nuestra intimidad.

¿Sabes quién posee uno de ellos? Nadie. Y no es porque no sean los juguetes sexuales más vendidos, sino porque todos estos juguetes eróticos son los que poseen a sus compradores que, ahora, no podrán sino someterse a los refinados placeres que les otorgan.