Películas eróticas

El auge del cine pornográfico mudo

Cinema polisson (Francia), cine escatológico (España), stag films (EEUU)… sea cual sea la denominación que recibieron las películas pornográficas mudas, es innegable que el cine porno se expandió rápidamente en las primeras décadas del siglo XX, a pesar de la persecución policial y las sanciones legales, que incluían penas de cárcel y destrucción de todo el material requisado.

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Películas eróticas

Rodajes y proyecciones en la clandestinidad

El riesgo que corrían las personas involucradas en el rodaje de las películas pornográficas les impulsó a rodarlas en la clandestinidad, sin incluir en los títulos ninguna alusión a su autoría, o a usar seudónimos no exentos de humor, como en The Surprise of a Knight (1929), la primera película porno gay hardcore de la historia del cine, firmada por Oscar Wild (como guiño al gran escritor, poeta y dramaturgo inglés Oscar Wilde, encarcelado por su homosexualidad) o en A Free Ride, en las que aparecen A. Wise Guy como director, Will B. Hard como fotógrafo y Will She como guionista,

En cuanto a los actores, Dave Thompson afirma en su libro, Black and White and Blue: Adult Cinema from the Victorian Age to the VCR, que el elenco de las primeras cintas pornográficas eran personas de bajo estatus social, como prostitutas, personas sin hogar, drogadictos, enfermos mentales y delincuentes menores; aunque era probable que, en algunos rodajes, actuaran hombres con un estatus social más alto, ya que en películas como A Free Ride, ocultaban su cara con maquillaje, bigotes postizos o máscaras.

En un principio, la mayoría de las películas pornográficas mudas eran rodadas bajo el mecenazgo encubierto de reyes, nobles y personas adineradas que, además de aportar dinero, proponían los guiones e incluso participaban en la elección de las actrices. Si bien estas películas eran vendidas para ser vistas por sus promotores y compradores en la clandestinidad de sus palacios y lujosas residencias, en realidad circulaban copias de muchas de ellas para que el pueblo disfrutara de su visionado en burdeles o clubs de caballeros, como los Herrenabende (espectáculos nocturnos para hombres) austriacos o los smoker estadounidenses (llamados así por el humo de los cigarros y del opio que nublaba el ambiente).

Argentina: La meca del cine pornográfico mudo

Aunque Francia fue la cuna del cine erótico y pornográfico, la censura y el escarnio público impulsó a grandes productores como Pathé y Gaumont (la primera compañía cinematográfica de la historia) a rodar porno en Argentina, por lo que, en apenas unos años, se convirtió en la meca del cine pornográfico. Autores como David Kerekes, Arthur Knight y David Slater afirman que en la zona roja de Buenos Aires se filmaron, proyectaron y exportaron multitud de cintas porno a compradores privados de todo el mundo, incluyendo lugares tan remotos como Rusia y los Balcanes, que luego se proyectaban en Argentina en salas de proyección clandestinas o en burdeles, como la famosa El Sartorio, considerada una de las primeras películas pornográficas de la historia, junto con la francesa A L’Ecu d’Or ou la bonne auberge (1908) y la alemana Am Abend (1910).

Cine porno silente en México

Otro país con una interesante producción pornográfica fue México, a pesar de que había pena de prisión, tanto para los productores como para los espectadores de este tipo de material. En las primeras décadas del siglo XX, se rodaran títulos tan sugerentes como Chema y Juana, Las lesbianas calientes, Mamaíta, Rin Tin Tin mexicano, Mexican Big Dick, El monje loco o El sueño de Fray Vergazo, que luego fueron proyectados en la ciudad de México en los altos del salón-cine Venecia y en la librería La Tarjeta, fundada por el español Amadeo Pérez Mendoza que, por esto y por las revistas y libros que vendía, fue objeto de un proceso judicial como presunto responsable del «delito de ultrajes a la moral pública o a las buenas costumbres».

En la actualidad, la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) conserva 35 películas pornográficas obtenidas por medio de donaciones y adquisiciones en los mercados de viejo, que están a disposición de los investigadores que lo deseen. Según  la directora de Actividades Cinematográficas de la UNAM, Guadalupe Ferrer, en declaraciones a EFE, aunque los temas que aparecen en las cintas pornográficas son variados, predominan los personajes de curas y dos de los arquetipos más conocidos de la cultura popular mexicana: Chema y Juana, el charro (vaquero mexicano) y la china poblana (mujer vestida con atuendo típico, característica de una región), por lo que tienen un gran valor documental, ya que «Es un cine mexicano por la mirada de los personajes, dejan ver parte de México», afirmó por lo que tienen un gran valor documental.

Las stag movies estadounidenses

Los personajes de sacerdotes eran un tema recurrente no solo en el cine pornográfico mudo mexicano, sino también en el europeo, en especial en España y Francia. Fernando Sanz Ferreruela, profesor de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, afirmó que «En los filmes franceses, la ruptura de conceptos como el sacerdocio y el celibato se incrementa introduciendo escenas de voyerismo, relaciones homosexuales, múltiples y hasta zoofilia como elementos generadores de morbosidad».

Sin embargo, el cine pornográfico que se rodaba en EE. UU. bajo el nombre de stag movies no abordaba el tema religioso. Según el director, productor y experto en pornografía, Paco Gisbert: «Al contrario que en Europa, en Estados Unidos las películas porno no incluían el tema religioso. Las historias se desarrollaban al aire libre, en espacios abiertos por la misma capacidad técnica que tenían se mostraba el sexo como una forma inocente de diversión». El porno mudo norteamericano aprovecha situaciones cotidianas como la visita de un médico o del fontanero o excursiones al campo o a la playa, como el corto On the beach o A Free Ride (también conocido como A Grass Sandwich), considerada la primera stag movie.

Aunque algunos autores afirman que A Free Ride fue rodada entre 1907 y 1915, otros como Kevin Brownlow consideran que el rodaje es posterior (alrededor de 1923), por el tipo de moda que se aprecia en la cinta.  De hecho, el Kinsey Institute for Research in Sex, Gender, and Reproduction la ha fechado entre 1917 y 1919. Sea como sea, A Free Ride o A Grass Sandwich sigue teniendo un gran valor documental, no solo por ser una de las stag movies mejor conservadas de todas las que guarda el Instituto Kinsey, sino porque es una de las pocas supervivientes de las 2000 (aproximadamente) que se rodaron en EE. UU. entre 1915 y 1968.

Fuentes:
La era del cine porno mudo – BBC News Mundo
La Otra Vaca: La primera vez
Cine Argentino – Casa Argentina en Tenerife
Anales del cine en México: El cine y la pornografía de Juan Felipe Leal | CINE SILENTE MEXICANO / MEXICAN SILENT CINEMA (wordpress.com)
La pornografía de los años 20 (montevideo.com.uy)
El cine porno mudo | el blog de Lente Creativo (wordpress.com)